Ivette Sosa
Ampollas en la piel de manos o pies son su manifestación inicial. Dishidrosis, es el nombre del padecimiento.
Expertos han detectado que entre las manifestaciones físicas del estrés se encuentra la dishidrosis, un problema cutáneo, también llamado eczema dishidrótico o pomfólix.
“Este trastorno -explica el médico cirujano Jeremías Sánchez, de la UNAM-, inicialmente se manifiesta a través de ampollas con líquido en las palmas de las manos, en las plantas de los pies, o ambas extremidades”.
QUEMAZÓN Y PICAZÓN INTENSA
En entrevista con diarionoticiasweb.com señala el experto que las ampollas permanecen por unos veinte o más días, sobre todo en personas alérgicas, las cuales provocan “una sensación de quemazón y picazón intensa”.
“La piel se inflama a grado tal que se produce una dermatitis y se forman grietas que generan gran dolor al paciente”, explica el galeno.
La zona afectada sufre descamación -añade-, hasta que se forma la nueva piel. Sin embargo, refiere que en algunos enfermos predomina la fase vesicular y en otros la descamativa con formación, incluso, de dolorosas grietas o fisuras.
PADECIMIENTO CÍCLICO
Jeremías Sánchez señala que este padecimiento es cíclico, es decir, desaparece y aparece nuevamente, muchas veces en situaciones de estrés.
-¿Doctor, cuáles son sus causas?
“Éstas no se conocen del todo. Durante un tiempo se pensó que se debía a un trastorno de la sudoración, de ahí el nombre de dishidrosis; no obstante, esta tesis ha sido rebasada y actualmente no es considerada cierta”.
-¿Existen factores de riesgo?
“Sin duda, además del estrés, entre ellos podemos hablar de ser mujer, a climas cálidos, sufrir de alergias estacionales y exponerte constantemente a detergentes y disolventes”, anota el experto.
